En la morgue de Bello Monte, el oficial jefe de la Policía Nacional Bolivariana, Oscar Valero, y su esposa Arelis Urbina, cabo I de la PM, narraron las horas de angustia que vivieron durante sus recorridos por varias clínicas, donde les negaron el ingreso al infante, "debido a fallas en el seguro de hospitalización” de los organismos donde laboran.
Arelis Urbina y Oscar Valero, Oficial jefe de la Policía Nacional Bolivariana y cabo I de la Policía Metropolitana, respectivamente, acudieron este miércoles a la morgue de Bello Monte, para retirar el cadáver del menor de sus tres hijos, Daniel Valero, de apenas tres años de edad, quien falleció este martes en la clínica Nueva Caracas de Catia, luego se ser “ruleteado” por varios centros asistenciales, donde les negaron el ingreso debido a fallas en la clave del seguro de hospitalización de ambas policías.
La madre del pequeño, narró desconsolada las horas de agonía que antecedieron a la muerte de su hijo y como estuvo recorriendo clínicas y hospitales, a bordo de una motocicleta que conducía su esposo, en busca de que le brindaran atención médica al pequeño. Daniel Valero, su hijo, comenzó a quejarse de un fuerte dolor, en una pierna desde el pasado viernes. El lunes 18, sus padres decidieron llevarlo a la clínica La Arboleda, donde al ingresar la clave del seguro HCM de la PNB, aparecían registradas sólo ella y sus dos hijos mayores, mientras que el menor de ellos, Daniel, no registraba.
Valero asegura que incluso, en la pantalla aparecían aseguradas con su clave, personas que ella ni conoce. Además, sus datos no estaban actualizados con la PNB, sino que estaban como si ella aún estuviera activa en la PM, donde prestó servicio hasta hace tres meses. La misma situación ocurrió con la clave del seguro de su esposo, Oscar Valero, pero en su caso, no fue admitida. La madre del niño, contó que en los médicos sólo le dijeron que niño presentaba un desgarre muscular, pero no podían ingresarlo y debía esperar. La pareja decidió ir la Clínica Popular de Caria, donde le dieron el mismo diagnóstico y le aplicaron una inyección de un relajante muscular, pero a las 2 horas de haberse marchado del sitio, el niño comenzó a quejarse aún más por la dolencia.
Los funcionarios llevaron a su hijo al hospital de Niños J.M de Los Ríos, donde no quisieron atenderlo porque no era una emergencia. “Yo me colee por detrás y logré que le hicieran una placa, pero no salía muy claro si tenía un desgarre o una fractura”, contó. Debido a que el estado del pequeño empeoraba y el dolor era cada vez más fuerte, el martes lo llevaron al instituto “Vista Centro”, en el centro de Caracas, donde pagaron el servicio para que lo examinaran y les entregaron una referencia para que fuera admitido en La Arboleda.
La oficial de la PNB, contó que en la clínica tampoco lo recibieron con la referencia porque el problema de la clave del seguro se mantenía. Urbina insistió casi suplicante, hasta que una doctora la atendió y le dijo que lo único que podía hacer por ella, era acostar a su hijo en una camilla afuera y colocarle un calmante, a lo que la funcionaria se negó, lo tomó en brazos y se marchó.
Esta vez intentaron llevarlo al Centro Diagnóstico Integral , donde no aceptaban las claves, ni de la PNB ni de la PM. Finalmente, casi a las 6:30 de la tarde del martes, la pareja, llegó con el niño en moto, a la clínica Nueva Caracas en Catia, donde, tras una llamada de un directivo de la PN, los recibieron por que la clave seguía siendo rechazada.
Sin apoyo en la PNB
La madre del pequeño, manifestó su dolor y la decepción que la embargaba al no haber contado con el apoyo de la institución -Policía Nacional Bolivariana-, donde desde hace tres meses labora, adscrita al servicio de seguridad que prestan en Metro de Caracas. Contó que siempre estuvo llamando por teléfono a sus superiores, en medio de la emergencia con su bebé, en busca de alguna ayuda, pero solo le suministraban teléfonos a los que debía llamar y cuando lo hacía, le salía la grabadora. A las 8:00 de la noche del martes, a una hora y media de haber sido atendido por los médicos de la clínica Nueva Caracas, el niño murió. La autopsia que le practicaron en la morgue de Bello Monte, reveló sorpresivamente que la causa de muerte fue una pulmonía
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