Los ríos Matasiete, Valle, y Birigute se desbordaron en Nueva Esparta, motivo por el cual el gobierno regional trata de controlar la situación, y mantener a resguardo la mayor cantidad de personas en los refugios.
La alcaldesa Marisel Velásquez, del Municipio Díaz, califica la situación como grave y delicada. Sin embargo acota que todas las autoridades están en la calle trabajando en conjunto para desalojar la mayor cantidad de familias posibles, “que se ubiquen en la desembocadura del río San Juan Bautista. Son unas 150 familias aproximadamente, y esas viviendas se encuentran en alto riesgo porque ese río está por desbordarse”.
Las zonas afectadas son las urbanizaciones Ciudad del Sol y Cotoperí, la primera con unas 400 familias, y la segunda, “alrededor de 1200 familias. Se encuentran en riesgo por el desborde del dique de San Juan, que trae como consecuencia del rio San Juan Bautista, por lo que estamos tomando las previsiones, de llevar a las familias en situación de riesgo para los albergues”.
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